martes, 1 de julio de 2008

PROBLEMAS SOCIALES DE AMERICA LATINA

TODOS PUEDEN APRENDER?
Últimamente se presentan dos líneas de pensamiento que confluyen en la «zona de riesgo» que señalamos. De un lado —el progresista— se viene escuchando con cierta frecuencia la aplicación del concepto de educabilidad, no ya como condición innata de todo ser humano sino como resultado de las condiciones sociales previas a la escolarización de cada niño. Hay incluso quienes buscan el indicador que permita identificar el número de niños «por debajo de la línea de educabilidad». Del lado del ultraliberalismo el concepto es el darwinismo, es decir, la presunción de que hay factores sociales y culturales que terminan tornándose en genéticos, al punto de predeterminar el futuro de los niños. En definitiva, unos desde el reconocimiento del drama social, otros desde la exaltación de lo orgánico, ambos coinciden en relativizar las posibilidades de éxito de los más pobres.
Estoy segura de que lejos del ánimo de quienes desarrollan esas teorías está condenar a quienes tienen la desgracia de conformar esa franja de la población destinada a la marginación definitiva que implica la falta de educación. Pero más allá de las intenciones, las consecuencias de tan terminante caracterización pueden llevar justamente a esa conclusión. Por eso resultan tan importantes las contribuciones de las experiencias e investigaciones que analizan las causas del éxito en el rendimiento y escolarización de alumnos de sectores postergados, como la disponibilidad de libros en las aulas, la cercanía de la escuela, la adecuación de la propuesta curricular o la educación preescolar; todos ellos muestran fuerte incidencia sobre las posibilidades educativas de los alumnos, a pesar de sus difíciles puntos de partida familiares.